Del infierno al cielo, los cuatro supervivientes del descenso que ahora celebran con el Bergan
CARBALLO MUNICIPIO
«Había esas ganas de revancha persoal», «sentí un gran alivio» o «lo tuve claro tras tremendo varapalo» confiesan Remeseiro, Canedo, Pedrosa y Tomé
07 may 2024 . Actualizado a las 12:25 h.Marcos Remeseiro (A Coruña, 1992) lo tuvo claro en todo momento durante el verano. «No era el momento, ni para mí ni para el club. No me iba a ir a gusto si decidiese marchar», explica el centrocampista coruñés, que se adueñó del brazalete de capitán tras la marcha de Agulló. Por eso, sumar su segundo ascenso a Segunda Federación en estas cinco temporadas que lleva en As Eiroas fue muy especial: «Al acabar el partido contra el UD Ourense, más allá de la inmensa alegría de lo conseguido y la celebración por el título y el ascenso, sentí un gran alivio personal porque al final los que estuvimos ahí sabemos lo duro que fue, sobre todo pasar tanto tiempo sabiendo ya que estábamos descendidos y deseando que acabase», confiesa. «Aunque a medida que se acercaba el final y durante el verano fue fácil mentalizarse de que había proyecto para volver a subir», matiza.
No obstante, la revancha y la consecución de los objetivos cree que no la disfrutaron lo suficiente: «No supimos. Y puede parecer que fue un cuento de rosas, pero ha sido un año muy complicado en el que yo creo que los que seguimos del año pasado teníamos aún más presión», explica el 10. «Hace ya unas semanas que superamos la puntuación con la que el Fabril fue campeón», resalta para valorar lo logrado. Ahora, espera que disfruten los que menos protagonismo han tenido: «Con los años te das cuenta de que son tan importantes como los que lo juegan todo».
«Había esas ganas de revancha persoal»
Como un dos poucos carballeses dentro dese vestiario e segundo capitán do Bergan, Santi Canedo é, seguramente, dos que máis sente o club, no que se formou ata categoría alevín antes de volver na campaña 2019-2020. O ano pasado foi, por iso, moi complicado para el, pois pese a ser seleccionado pola afección como o mellor xogador do Bergan, encaixou 48 goles en 30 partidos. Este curso xa xogou eses mesmos partidos de liga, encaixando só 17 tantos. Foi vital, polo tanto, para consumar o seu segundo ascenso á Segunda Federación nas Eiroas. «Neste ascenso tiven máis participación, pero sempre se disfrutan igual. Son momentos que hai que gozar porque o fútbol é moi caprichoso e igual que tes estes momentos, despois vives situacións peores e moi difíciles», explica o porteiro. «Evidentemente había ganas de desquite persoal despois de quedar do ano pasado. Pero ás veces, nalgún momento da tempada sentín bastante impotencia. Estabamos facéndoo ben, en gran momento e vías que non se estaba disfrutando todo o que se debería no que rodea ao club. Pensas, ‘‘que máis hai que facer?'' para que a xente estea contenta. O ano pasado vivimos algo catastrófico. Este ano en outubro xa levabamos os mesmos e dábame rabia que non se valorase. Non sei se o Bergan ten unha Copa de Europa e eu non me enterei», bromea Canedo, que admite que para os xogadores que decidiron renovar, iso de darlle a volta ao rendemento do ano pasado era un dos grandes obxectivos: «Quedamos porque sabiamos que podiamos facelo».
«Lo tuve claro tras el tremendo varapalo»
Dani Pedrosa (Lugo, 1996) fue uno de los grandes protagonistas del último esprint del Bergan hacia el título y el ascenso, con su gol frente al Paiosaco y sus geniales minutos contra el Ourense. Se resarció así de un curso condicionado por las lesiones, pero también de la temporada pasada. «Claro que había ganas de revancha, después de un año como el anterior, en el que había tanta esperanza en hacer un buen año en Segunda RFEF, y unido a ser año del centenario, fue un varapalo tremendo...», indica el delantero lucense.
Pese a esa desilusión, en verano fue uno de los cuatro futbolistas rojillos que decidieron seguir en Tercera. «La verdad es que lo tuve muy claro. El Bergan me ofrecía todo lo que buscaba y la temporada anterior habían tenido un trato increíble conmigo aún siendo un mal año, así que tenía ganas de ser parte de un buen curso para el club», explica Pedrosa, que en nueve partidos como titular ha hecho tres goles que dieron varios puntos. «Sabíamos que éramos el proyecto más fuerte de tercera y que íbamos a tener la etiqueta de favoritos, eso siempre es difícil de gestionar, pero creo que hicimos un gran año, muy regular», concluye.
«Volver a ganar aporta mucho a nivel mental»
Si desde dentro del vestuario advierten de que el camino a ser campeones no lo han disfrutado tanto como deberían, más motivos tiene Jorge Tomé (Culleredo, 2000), que arrastró una lesión grave en su rodilla desde la última jornada del año pasado y no pudo regresar a una convocatoria hasta mediados de febrero de este 2024. No obstante, cuando aún no sabía que estaría tanto tiempo en el dique seco, aceptó renovar sin dudarlo demasiado tras su experiencia en Segunda Federación: «Más que una revancha personal, había ese sentido de culpabilidad por ser parte de la situación que llevó al club al descenso», explica. Esa culpa, y la buena pinta del proyecto, fueron claves para que optase por continuar en As Eiroas: «Todos sabíamos que se iba a hacer un proyecto potente y que el objetivo estaba claro, no valía otra cosa que no fuese ascender, así que cuando te proponen algo de esta magnitud… Es difícil rechazarlo», indica el joven central. Así analiza lo que ha sido la temporada: «Volver a ganar aporta mucho a nivel mental, pero sabíamos que íbamos a ser el equipo a batir y eso conlleva una responsabilidad con la que hay que saber convivir», concluye.